domingo

la más copada de todas

de todas las abogadas que caminan por tribunales, hay una mujer en especial, tendrá unos 65 años, va de jogging y zapatillas, como si estuviera haciendo footing todo el tiempo. la verdad que es una copada porque todos los abogados hacemos footing en esta profesión, sólo que ella se anima a ser ese arte conceptual que nadie es porque la careteada puede más. se nota que fue rubia, ahora tiene el pelo blanco y largo y se lo ata. tiene un novio o festejante que es medio rengo y ella lo ayuda a cruzar la general paz. otras ya estarían pintando naturaleza muerta pero ella sigue ejerciendo. parece una alemana de villa general belgrano, es callada y seria y espera en los juzgados con total tranquilidad sin quejarse, como sí lo hace la mayoría. esa mujer es un poema. lánguido y perseverante. sus zapatillas son rosa, siempre, y el jogging es de tela de avión. siempre lleva un halo etéreo y a veces usa remeras con leyendas que evocan a los derechos humanos. es una militante de algo, no sé bien de qué. todos la conocen pero nadie se da cuenta.

martes

www.twitter.com/ponele

la clave del éxito


hace cerca de 15 horas via web

que tengo algunos fans

hace cerca de 16 horas via web

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cierta discreción

hace cerca de 16 horas via web

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que si no va, viene

1:43 AM Apr 7th via web

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que se terminó

1:33 AM Apr 7th via web

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que sos de manual

1:31 AM Apr 7th via web

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que sigo siendo el rey

12:50 AM Apr 7th via web

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que yo sí puedo entrar.

9:36 PM Apr 6th via web

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que hay que remarla

11:04 PM Mar 22nd via web

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que no era tan así

10:39 PM Mar 15th via web

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que mientras (él) se curte a la amiga petisa, un amigo le hace un petiso (a él)

10:34 PM Mar 15th via web

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que es algo central y medio ciclotímico

4:10 PM Mar 5th via web

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que te creo la mitad

7:49 PM Mar 2nd via web

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sacale ponele sacale ponele sacale y así.

12:55 AM Feb 28th via web

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que se pone a temblar

12:54 AM Feb 28th via web

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que quiero la clave

9:12 PM Feb 27th via web

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el capuchón

9:00 PM Feb 27th via web

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que no mentís por un año

2:37 PM Feb 25th via web

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*se puede leer desde arriba o desde abajo; es mi favorito n° 1, tengo 3. 

jueves

ojalá sobreviva tanto como las putas de las cucarachas

mucha violencia doméstica últimamente/psicológica, diría mi amiga vivi/no menos agresiva, le contestaría yo/ como si una piña fuera lo peor/qué agradecido hubiera estado mi diván interior si varias rupturas se hubieran dado luego de una riña cuerpo a cuerpo/ hace dos semanas comí una cazuela de mariscos que contenía alta cantidad de pimienta en grano/ mordí cada una de ellas/ sin quererlo/ al sólo efecto de comerme los mariscos/ una trompada atrás de otra/ mi vida siempre estuvo marcada por cauces del estilo/ todo pasa en un unico e irrepetible acto/ confluyen todos los ríos en uno/ y se abren espacios tan grandes como el universo espiado desde un satélite/ un sólo oceano/ el resultado de múltiples partes que finalmente han encontrado el complemento/ una masa consistente que espera vendavales y ciclos de mutación/ muchas despedidas últimamente/ simbólicas, me diría una que yo sé/ no menos dolorosas, le contestaría yo/ la tristeza va mutando/ primero es algo negro que pide respuestas desde el centro de tu corazón/ y es terrible porque no hay/ das vuelta la cara en ciertos lugares/ salís rápido de otros/ y el coso negro ese es muy exigente/ quiere que le construyas un lenguaje a la tristeza/ entonces le pedís por favor al negro que te deje ir a trabajar/ que te deje ir a tienda san juan nuevo mundo a comprarte una colcha/ y el negro va atrás como una cortina oscura/ mucho silencio hay en ciertos golpes/ de estado/ en seco/ mi amiga ale me dijo que sobrevivo como las cucarachas/ creo que se arrepintió apenas lo dijo/ después el manto negro se convierte en reconocimiento del cuerpo/ y vas y mirás sin asco/ y sos capáz de atreverte a decir que se te rompe el corazón/ frases así tan hechas/ entonces te quedás con la impresión de la imágen todo el tiempo/ mientras te habla el gasista y te dice que tu horno puede estallar/ mientras te preguntás por qué ciertos conductores abusan del bocinazo/ mientras tu compañero de trabajo te dice que nos van a hacer cagar en el juicio contra la tarjeta de crédito/ va uno y va la foto del cuerpo/ la última impresión/ las primaveras y las tempestades/ y las crisis financieras/ y los picos de raiting del prime time de canal 8/ se puede entender que uno tiene que amarse por sobre todas las cosas/ y después con esa medida amar al otro/ podés asimilar el amor al prójimo como un reflejo del amor propio/ aunque no/ aunque nunca dejás de no tener respuestas para el amor que das/ el que te has sacado y has entregado/ el famoso saco que uno ofrece/ ante eso no hay respuestas/ no hay símbolo/ no hay psiquis/ no hay luto/ no hay más que silencio/ que se proyecta/ que se lanza al vacío/ en ofrenda a lo que se va/ y sí/ es así/ la tercera etapa es cuando te falta un libro en la biblioteca/ no sé/ te sobra una media en el cajón/ se lo dije a mi mamá hoy/ hay una velocidad a la que vas y de repente la velocidad se frena/ hay una onda expansiva inolvidable/ me miró fijo como muy pocas veces en la vida/ estabamos diciendonos chau/ te quiero/ te voy a extrañar/ no lloremos/ no da/ si te voy a querer igual

miércoles

ella quiere que él visite a su hijo en la puerta de su casa
él contesta que en invierno no puede tener al chiquito en la intemperie
ella se niega a que lleven al niño a la casa paterna
porque la abuela lo sauma y lo pelan por costumbre familiar
le pide a su abogada que en el régimen de visita solicite expresamente que no lo rapen en invierno
él le dice al secretario que toma la audiencia que no cuenta con otro lugar para llevar a su hijo
ella dice que le tiene miedo a él y a toda su familia
él contesta que ella es una caprichosa
ella evoca a la convención internacional de los derechos del niño
el secretario habla de la salud mental del menor
ella se secretea con su abogada
él la mira detenidamente
le rastrea los gestos
quizás se los conoce de memoria
ella desvía la mirada hacia él
él mira para abajo
ella se queda un instante clavándole los ojos
pedimos al secretario que llamen a la defensora de menores
que dirima, que presencie
el secretario le pregunta desde cuándo están separados
ella responde con resquemor: 3 meses
él asiente con la cabeza rapada y mira para abajo
ella lo observa
de la defensoría mandan a una secretaria
ella plantea la posibilidad que el padre pueda ver a su hijo en presencia de una custodia judicial
todos la miramos con cara de en qué país creés que estás viviendo chiquita caprichosa
la secretaria de la defensoría de menores le contesta
los padres son los garantes de la integridad de sus hijos
y usted lo eligió a él como padre del menor
nadie, aquí, lo conoce mejor
ella rompe en llanto
él tiembla
hace más de una hora que estamos parados en una oficina pequeña iluminada por una ventana que da a la plaza de tribunales
llueve finito
el verde de las plantas, los arbustos y los árboles es muy oscuro
pasa una señora con un perro
ella no quiere negociar
la abogada se está rindiendo
el secretario tiene ganas de fumar y prende un cigarrillo
yo quisiera pedirle una seca
la secretaria de la defensoría se retira
el secretario que toma la audiencia se va a buscar resma de papel para imprimir la audiencia
ella llora y habla por lo bajo
él la mira por encima del monitor de la computadora que los separa
se le llenan los ojos de lágrimas y hace un gesto negativo con la cabeza
se pone las manos en los bolsillos
ella sostiene fuerte una servilleta de papel tissue
y lo mira firme
mostrándole todo eso que ya han visto antes
en otros lugares
en otros horarios
cuando estaban solos
quieren llorar los dos
vuelve el secretario los abogados
todos firman el desacuerdo de la audiencia
salimos al pasillo
y ella se da la vuelta para mirarlo por última vez

jueves

una vez conocí a raphael

cuando era chica tenía problemas en los oídos, me dolían muy seguido, muy profundamente. la primera vez fue con la presurización del avión en que viajábamos a villa gesell para que la niñita conozca el mar. tenía muchos más rulos que ahora que existen las planchitas. un punzón metálico infalibe en mis orejas, succionaba mis timpanos -inolvidable dolor-. la azafata me traía caramelos y mi mamá me masajeaba la cabeza. la visión del mundo se vuelve oval y somnolienta, la crudeza de las puntadas en lo hondo no permitían más que fruncir todo el cuerpo para que no estalle la sangre contra las ventanillas. me tapé lo más que pude con mis manos. apreté -esos ademanes involuntarios para esconder el dolor- con mis palmas en ventosas sobre mis orejas, esos movimientos absurdos, al presionar, el dolor se hacía más agudo. antes, esperando nuestro vuelo, nos sentamos en el viejo bar del aeropuerto benjamin matienzo (almohadones de cuerina de los 80, mucho cantero de marmol) desolado enero, un día donde los contingentes populares no viajaban, además la inflación no permitía el lujo de un pasaje de avión. para mi mamá, una arquitecta de 31 años recién separada,  también era un lujo, pero -según ella- yo no iba a aguantarme 24 horas de viaje en tierra, por el baño y esas cosas -también en palabras de ella-. entonces la mejor idea de la señora esta fue sacar dos pasajes que deben haber costado 4 o 5 millones de australes cada uno y tratar de fugarnos del ya conocido tucumán en llamas. vuelvo al bar. saqué todos los almohadones de cuerina de los asientos de la espera del aeropuerto y con ellos construí una casa, después los convertí en una gran cama y me acosté un rato, más luego me agarró la ansiedad caracteristica y fui a increpar a mi mamá para que nos vayamos y ya mismo, o sea, ahora y punto. sólo dos mesas estaban ocupadas en el bar, la de la señora madre de la pequeña ruluda cascarrabias y la de raphael y su representante. raphael se detuvo a oír mis quejas malhumoradas mientras sacaba servilletas con el logo de aerolineas y me las metía en el bolsillo para algún día que las necesite más. mi mamá se acercó y me dijo al oído, ese es raphael y yo, muy nerviosa y llena de adrenalina por lo que sabía que me esperaba - ya me había dedicado a oír las turbinas de los aterrizajes de otros aviones, había corrido hasta la terraza a ver qué era ese monstruo que me iba a llevar vaya a saber dónde; sentí el mismo miedo que sentía cuando rendía parciales orales en la facultad- di vuelta la cabeza y miré a un tipo muy feo con pelo tupido y anteojos oscuros que se reía con todos los dientes y dije: no sé quién es rafael, no, no sé quién es mamá, basta me quiero ir, estoy aburrida ya, no tengo qué hacer. raphael quiso tocarme los rulos mientras mi mamá pretendía que le pida un autografo con las servilletas que me había robado de la mesa. le saqué la cabeza de las manos. mi mamá se disculpó con él y su representante, y en ofrenda a ello, me retó diciéndome atrevida. luego agarré un pañal de tela blanco, con el que nos ataban la cola en aquella epoca, que yo guardaba limpio y esplendoroso y al cual le daba un uso alternativo que era el siguiente: sin ese pañal yo no podía conciliar el sueño. hay que tener en cuenta que estoy hablando de una ultra neurótica de 3 años de edad.por lo que me lo ponía en la cara y la sensación de suavidad me calmaba. munida del pañal, cruzamos la pista con la señora recién separada y subimos las escaleras del aerolineas argentinas. luego tuve deseos profundos de bajarme, luego mi mamá dijo: no podés bajarte ahora van a echar un aire para que podamos respirar en el cielo y cuando vi que cerraron la puerta, sentí una sensación de desesperación muy parecida a las ganas de hacer pis. después el oído. cuando la máquina empezó a flotar por el aire, me mostró los cuadrados perfectos de los cañaverales, me habló de mi papá un largo rato, vaya a saber qué habrá sentido.

sábado

del desbarranco cae todo lo que pueda nombrarse
un trabajo de albañilería contra una puerta que no se abre
virutas, chispas, humo sobre una casa llena de eco
del desgarro esa música del despegue
carretear sobre la pista y posar en el aire la venda
tomarla con el indice y el pulgar
y observar las huellas negras del marco
y por dentro la carne rosa y limpia
hay un momento de efervescencia
los nervios se crispan desacostumbrados a tal disparo de fuerza
el modo en que suena el derrumbe
el modo en que se cambia una cerradura
la reluciente y segura la nueva protección
siemrpe prometemos que esta vez vamos a cuidarla
y que esta vez vamos a limpiar el bronce del picaporte
en esos momentos muertos entre el hervor del agua para el café y alguien que no contesta el teléfono
del derrumbe un halo con cuerpo
un fantasma despierto nuevamente
viene a traernos recados olvidados
notas que dejamos pegadas en algun lado
fotos bellísimas que nos hacen estallar
una musica que suena en el fondo de un hueco
el grifo del baño no está bien cerrado
por la ventana se ven las luces indemnes
alguien camina por el pasillo

viernes

todo lo que tengo para decirte
todo ese todo
que parece un hallazgo
que me hace cambiar el tono de las cuerdas vocales
no podría decirlo en un poema
ni ahora
que me caen gotas por la panza
y que pienso hasta cuándo este calor
se derriten los huevos de chocolate
no llueve
y las pascuas no son iguales si no hay frío
por algo estamos aquí
dice tu libro
el que encontraste para mí
cómo puede haber sido tan fácil
estaba a dos estantes de mi cabeza
yo solo miraba al frente
los de nick hornby que son una mierda a comparación del que vos encontraste
nos quedamos en silencio
nos miramos y nada ni las alfombras azules de la librería ni el A.A. perfecto ni los miles de estantes
nada más
por algo entramos ahí
sin un centavo
qué alegría no tener que dudar si llevarlo o no
compramos por separado
lo envolvimos para regalo
vos te fuiste antes para performear la sorpresa
me citaste en el bar de la terraza
desde donde se veía toda la ciudad caliente
te dije feliz cumpleaños y te entregué el libro que ya sabías
tu regalo no tenía motivo y me lo diste feliz
nadie se animaba a tomar café en la terraza con 38°
el bar era inmenso y estaba vacío
varios pisos en altura yo pedí un café y un vaso de soda y miré el damero español
y los techos y los autos pequeños
fuimos felices, también